Un requisito para la deducción por el uso comercial del hogar es que uses una parte de tu hogar como lugar principal del negocio. Este requisito no implica necesariamente que la mayoría de tus actividades comerciales se lleven a cabo en tu hogar. Significa que usas dicha parte del hogar de manera regular y exclusivamente para administrar o llevar adelante tu negocio y que una parte sustancial de dichas actividades de administración o gerenciales no se realizan en ninguna otra ubicación fija.
Si, además de trabajar por cuenta propia, tienes un trabajo regular, la pregunta sobre el “lugar principal del negocio” hace referencia a tus actividades de trabajo por cuenta propia, no a tu trabajo regular.
Ejemplo: Erin acaba de inaugurar su negocio de consultoría y designó un dormitorio libre de su hogar como oficina, que solo utiliza para fines comerciales. Erin pasa aproximadamente el 85 % de su tiempo fuera de casa y se reúne con potenciales clientes en distintos restaurantes y cafeterías. Sin embargo, realiza toda su programación, planificación y contabilidad desde su oficina en el hogar. A raíz de estas actividades administrativas, su oficina en el hogar califica como lugar principal del negocio, aun cuando pasa el 85 % de su tiempo fuera de ella.
