La criptomoneda se grava cuando la recibes como forma de pago o tienes una transacción en la cual la vendes o comercializas. Si solo la compras y la conservas, no se gravará hasta que hagas algo con ella. Incluso si no recibes un Formulario 1099-B, 1099-B, 1099-MISC o 1099-K, ni un resumen de impuestos para tus transacciones con criptomoneda, es tu responsabilidad reportarlas.
A efectos tributarios, se considera ingreso ganado o se trata como una venta de propiedad.
Se considera ingreso ganado en los siguientes casos:
- Recibes la criptomoneda como forma de pago por bienes o servicios (como si te pagaran en efectivo).
- La minas y obtienes una ganancia.
- Recibes nueva criptomoneda de una bifurcación dura seguida de una distribución u otra transferencia.
Se trata como una venta de propiedad (con ganancias de capital o pérdidas de capital) en los siguientes casos:
- La vendes (como lo harías con acciones).
- La intercambias (cambias un tipo de criptomoneda por otro).
- La gastas (la usas para pagar bienes y servicios).
- La conviertes a dólares estadounidenses (vendes criptomoneda para comprar moneda corriente).
Si alguien te paga con criptomoneda y, luego, la vendes y obtienes una ganancia, pagarás impuestos sobre los ingresos y pagarás el impuesto sobre las ganancias de capital.
Si donas criptomoneda, no está sujeta a impuestos. De hecho, es posible que puedas obtener una deducción por la donación.
Si alguien te regaló criptomoneda, la reportarás únicamente cuando la vendas, la intercambies o dispongas de ella de cualquier otro modo.